A los 15 o a los 80 años: los beneficios que puede traer la masturbación a las mujeres
Cada 7 de mayo se conmemora el Día Internacional de la Masturbación, fecha que se instaló luego de que en 1994 la entonces Cirujana General de EEUU, Joycelyn Elders, primera mujer y afrodescendiente en ocupar ese rol, tuviera que abandonar su trabajo tras decir que la masturbación "forma parte de la sexualidad humana y que debería enseñarse" en una conferencia de la ONU.
Masturbarse con la mano o con juguetes los genitales u otras zonas del cuerpo, en soledad o en compañía, rápido o dedicándole mucho tiempo, a los 80 o a los 15, puede traer beneficios como "la independencia sexual" de las personas con vulva, alcanzar la relajación o el conocimiento sobre la propia corporeidad, afirman especialistas en vísperas del 7 de mayo, Día Internacional de la Masturbación.
La fecha se instaló luego de que en diciembre de 1994 la entonces Cirujana General de Estados Unidos, Joycelyn Elders, la primera mujer y afrodescendiente en ocupar ese rol, tuviera que abandonar su puesto de trabajo tras decir en público que la masturbación "forma parte de la sexualidad humana y es parte de algo que quizás debería enseñarse" en una conferencia de las Naciones Unidas sobre VIH/SIDA.
Ahora, en 2023, en la porteña avenida Cabildo, en el barrio de Belgrano, donde antes funcionaba un Sacoa, se erige un enorme local con el frente negro, una imagen grande de un dildo y las letras gigantes en blanco y dorado de la marca de uno de los sex shops más importantes que comercializan en la Argentina, para que las personas, que antes se metían al fondo de una galería oscura para acceder a un juguete sexual, lo hagan ahora a la vista del público.
Con el paso del tiempo, la masturbación ganó lugar en las conversaciones y en los espacios públicos, pero continúa invisibilizada en ciertos ámbitos y especialmente en las personas con vulva frente a aquellas con pene, sostuvieron, en diálogo con Télam, la médica Sandra Magirena, y Tati Español, autora del libro "Todo sobre tu vulva. Apuntes sobre el placer".
"Hay cuatro palabras que fueron vedadas históricamente para la mujer: la vulva, la masturbación, la menopausia y la menstruación. Cualquier acto vinculado con estas palabras para las mujeres es un tabú", dijo Magirena, médica especialista en Ginecología y sexóloga por la Universidad de Buenos Aires, que sube contenidos en su cuenta de Instagram @consultoriomagirena.
En relación a esto, para Español, las personas con vulva "fuimos educadas en los placeres ajenos, no en los propios" y la masturbación "muchas veces tiene que ver con actos por fuera de la penetración: pasan más por el frote, el roce, la presión en los genitales".
"Todo eso durante mucho tiempo estuvo muy mal visto: vivimos en una sociedad que entiende a la sexualidad como pene en vagina para favorecer la reproducción. El placer propio y personal no es algo de lo que se nos haya hablado, incentivado a escuchar y a procesar", agregó la educadora sexual e influencer.
Ante esta situación, las entrevistadas coincidieron en la importancia de conocer el cuerpo propio, mapearlo y explorarlo para comprender qué cosas generan placer y cuáles no.
"Es importante no creer que hay una receta para todo el mundo, que hay un paso a paso, una forma que nos va a funcionar a todos. Por eso es una cuestión de probar, explorar, de divertirse, sobre todo. Masturbarse trae mucho placer e información sobre nuestro cuerpo y nuestros placeres", sostuvo Español.
Entre los beneficios que puede traer esta práctica, Magirena señaló el conocimiento del propio cuerpo, la relajación, descargar tensiones, "mejorar la química del cerebro y la circulación sanguínea de la zona pélvica".
Además, Español destacó la "independencia sexual" que genera esta práctica y la posibilidad de "saciar una calentura".
"Hemos sido instruides para creer que solo la podía saciar un tercero y entonces muchas veces nos quedamos en vínculos que no queremos o tenemos una cita con el que ya sabemos que nos rompe el corazón solo porque estamos calientes. También puede pensarse cuando estamos en pareja y nuestra pareja no tiene ganas. Es muy raro que el deseo coincida siempre con el de esa persona", dijo.
La masturbación no necesariamente debe darse "en solitario", sino que también puede ser parte de un encuentro sexual con otras personas.
"Muchas veces masturbarse en un encuentro sexual está mal visto o se ve como una falla de la otra persona. Y la verdad que no: la masturbación nos ayuda un montón. Hay gente que solo encuentra sus orgasmos tocándose ella misma. Es un complemento muy interesante para disfrutar con otres", añadió Español.
La masturbación acompaña todas las etapas del desarrollo de una persona y presenta características diferentes según el rango etario de cada persona.
"La mujer que pasa los 50 años hoy está mucho mejor conectada con su sexualidad que las mujeres menores. Yo sigo viendo -como soy ginecóloga infanto juvenil- mucha dificultad en la conexión con la sexualidad de las jóvenes y las adolescentes y las mujeres de edad cíclica", advirtió Magirena, en base a las conversaciones que tiene en su consultorio.
Al esbozar una posible teoría sobre por qué sucede esto, la médica consideró que "tanta exposición, tanto acceso a la información directa y tanta habilitación de la pornografía hace que las personas en general no tengan un espacio para permitir el desarrollo de la fantasía erótica, que es el motor fundamental para dar funcionamiento a la respuesta sexual".
"Nosotras no teníamos celular, nos teníamos que imaginar todo. Cuando nos encontrábamos con nuestros noviecitos hacíamos de todo en el zaguán pero no nos sacábamos la ropa. Entonces el erotismo se iba a mil y después te quedabas en el cuarto sola y te masturbabas sí o sí porque era la única forma de descargar la tensión sexual", explicó.
En este sentido, recomendó "tener la mano más en el cuerpo y menos en el celular" ya que "por más que mires mil videos es una en su intimidad la que encuentra qué le genera placer".
La aparición de los juguetes sexuales en la escena pública, como el video de la música y actriz Lali Espósito mostrando que lleva en su cartera un juguete sexual, sumado a las publicidades de marcas y la proliferación de información al respecto, se volvió más frecuente en los últimos años, especialmente durante la pandemia por Covid-19, indicaron las entrevistadas, que celebraron este proceso.
Sin embargo, Español también advirtió sobre el problema de que "pasemos de la visibilización al mandato de la masturbación".
Cuando comenzó a brindar talleres hace seis años sobre sexualidad, hablar de masturbación "movía muchas cosas" en las y los participantes, entre quienes había personas "que nunca se habían tocado o siempre les había dado mucha culpa".
"Hoy, en ciertos contextos se ha ido popularizando esta idea, pero muchas veces -no siempre- desde un lugar del mandato. Muchas personas llegan a los talleres con culpa de no masturbarse. Parece que es algo que todas tenemos que hacer y no todo el mundo tiene ganas de masturbarse o es capaz de sacarse tantas capas de educación patriarcal que hemos tenido", concluyó. (Télam)